La Grafología se
encarga de estudiar los aspectos psicológicos de la persona, mediante el
estudio y análisis pormenorizado de su escritura manuscrita.
Todos proyectamos
en nuestra escritura las aptitudes intelectuales y vitales, formas y
comportamientos, capacidades, actitudes con los demás, maneras de comunicarnos
con el entorno, etc. La Grafología tiene como misión, precisamente,
la detección de todos los parámetros psicológicos de la
personalidad utilizando como única herramienta nuestra forma de escribir.
De esta manera, se puede lograr un certero análisis psicológico de cualquier
sujeto sin necesidad de conocerle personalmente, e incluso, habiendo ya
fallecido, puesto que cualquier carta que dispongamos de dicha persona nos valdrá
para un estudio grafológico.
Naturalmente,
dependiendo del material de estudio con que se cuente, el análisis de
personalidad será más o menos profundo y extenso. Es preferible
siempre cartas (o cualquier texto que haya sido realizado para que
sea leído por otra persona) antes que apuntes, debiendo figurar además la firma
habitual de su autor.